Pasaje Franquet

El pasaje Franquet, catalogado como bien cultural de interés local e incluido en el catálogo de edificios de carácter histórico, es un espacio singular de la ciudad enmarcado en un edificio de estilo ecléctico que fue construido en 1877. Comunica la calle dels Canvis con la calle de la Ciutat y da acceso a las viviendas adyacentes a través de dos grandes escaleras enfrentadas entre sí, ubicadas en el centro del patio. En la época de su construcción se consideró innovador, atendiendo a la tipología y estructura empleada.

El edificio que contiene el pasaje fue construido en un solar entre medianeras que estaba situado en un lugar privilegiado cerca del antiguo puente de barcas, adyacente al del viejo edificio del Ayuntamiento, actualmente desaparecido. Durante la Guerra Civil se salvó, aunque los edificios adyacentes fueron destruidos.

Las fachadas están construidas con ladrillo revestido de mortero. Se encuentran ornamentadas con una decoración sencilla pero efectista, basada en molduras, que se copió en otros edificios de la época. La cornisa está formada por unas ménsulas que tienen un motivo decorativo que se asimila a una gran flor, por debajo de la que se desarrolla una línea de arquería con mortero. El paramento de fachada presenta una serie de balcones con barandillas de hierro, destacando la del piso principal por las pequeñas pero precisas ménsulas. Las aperturas son principalmente adinteladas, aunque en el corredor central hay de medio punto. Se encuentran enmarcadas con jambas y pilastras adosadas con forma de fuste estriado, además de capiteles que recuerdan a los clasicistas. La fachada de la planta baja está rematada con piedra natural de acabado acolchado, mientras el acceso al pasaje se hace a través de una apertura en arco de medio punto que alberga una puerta-reja de forja trabajada de grandes dimensiones, obra de los Vericat.